06-11-1959.
Aquí usamos las palabras “Dios” o “Cristo” o “Imaginación” de manera intercambiable. Significan lo mismo. Si uso la palabra “Dios” porque me conmueve, o la palabra “Cristo”, es lo mismo. Es el poder fundamental que creó y que sostiene el universo y que también sustenta nuestro entorno. Se nos dice que hay un secreto para toda la creación: “En el principio era la Palabra y la Palabra estaba con Dios y la Palabra era Dios. Todas las cosas fueron hechas por él, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho”. Podríamos usar la palabra “imaginación”, pero el secreto aquí es “Palabra”. ¿Qué es la Palabra? Se hizo algo que fue hecho.
Te han enseñado a creer muchas cosas acerca de la Palabra. Lee la Biblia y encontrarás lo que significa, porque nadie familiarizado con las Escrituras podría dejar de ver que la Palabra es el sueño del hombre. Te han enseñado que es un ser, nacido de una manera milagrosa, sin el oficio de un hombre. Bueno, en cierto modo, lo es. Yo tengo un sueño y sale de la nada; no depende de ayuda externa. “Si hay un profeta entre ustedes, Yo, el Señor, me manifestaré a él en una visión; hablaré con él en sueños”. Así que, el vacío de Dios es el sueño del hombre. “Bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor”. Se le dijo en un sueño. Desde el principio hasta el final de la Biblia, Dios siempre está hablando a través de un sueño. En Job, él habla de dos tipos. El primero es un sueño y luego, una visión de la noche. “Él habla en sus oídos y los asusta con sus advertencias”. (Job 33:16; Versión Estándar en inglés (ESV)). Yo no tengo que quedarme dormido aquí para soñar. La pesadilla es el reordenamiento de los sueños del día. Se reorganizan dramáticamente y se me presentan, y si mi propósito es incorrecto, me asusta con una advertencia.
Hay una dada en Génesis por Israel. Primero fue llamado Jacob y luego él luchó por sí mismo por el nuevo nombre de Israel. A partir de entonces, sus sueños fueron hechos objetivos, por lo tanto, los sueños eran reales. Él hizo un trato con su tío Labán para que todos los animales manchados y rayados en los rebaños fueran suyos, y Labán estuvo de acuerdo, pensando que Jacob sería poco más que un esclavo mientras trabajaba para asegurar a la primera hija y luego a la segunda. Y entonces el Señor apareció en un sueño y le dijo a Jacob que todas esas cabras y carneros que saltaban sobre los rebaños cuando venían a beber, eran manchados o rayados. Y como los rebaños se criaron donde vinieron a beber, entonces la descendencia se hizo como en el sueño, manchada o rayada; Jacob se hizo cada vez más rico y su suegro no obtuvo nada de su duro trato. Lo que vio en el sueño del día, lo vio en orden cronológico en el sueño nocturno.
Nosotros vemos mil cosas durante el día y muchas veces cosas violentas, que serán reorganizadas y dramatizadas en el sueño de la noche, por lo que puede asustarnos con una advertencia, porque se nos dice: “Mi palabra no volverá a mí vacía, sino que debe cumplir aquello para lo que la envié”. Y la Palabra de Dios, es el sueño del hombre.
¿Puedes soñar hoy? Esa es la Palabra de Dios. A lo largo de toda las Escrituras se nos dice de la Palabra de Dios, y creemos que alguien realmente nos va a hablar. Podría llegar de esa manera cuando el hombre despierta completamente, pero generalmente viene en un sueño. A Salomón se le prometieron grandes riquezas y larga vida, y luego se despertó y “era un sueño”. Dios siempre aparece hablando al hombre en un sueño, entonces el vacío de Dios es el sueño del hombre. No tiene que ser un sueño nocturno. Vive tanto en tu sueño de día, que los sueños nocturnos sigan en orden cronológico, tal como lo vio Jacob respecto al ganado rayado y manchado. Aunque todo el rebaño es marrón, yo los veré manchados en el ojo de mi mente. Y aquello que se manifestó, fue manifestado en la imagen sostenida. El vio lo que quería ver en el sueño del día y luego en el sueño de la noche, se manifestó en orden cronológico. Pero el hombre es asustado por su sueño, pero se les muestra sólo para llevarlo a pensar más constructivamente durante el día. Porque Dios, es la imaginación del hombre.
Yo podría elegir en esta audiencia esta noche, una docena de personas que me han escrito sobre el control de sus sueños diurnos. Aquí hay un hombre, cuya propiedad estaba siendo deteriorada, sus inquilinos estaban atrasados en sus pagos, el padrastro era bebedor y los niños estaban descuidados y andrajosos. En lugar de tomar acción legal, el dueño tomó un paseo imaginario pasando por su propiedad y la vio en el estado bien-mantenido que deseaba verla. Las cosas empezaron a suceder. La mujer se rompió la pierna y fue al hospital; enseguida el padrastro desapareció. Cuando la mujer se recuperó, se ausentó por un tiempo con los niños y regresó con un nuevo esposo. El lugar está ahora en mejor condición que nunca, los niños están bien cuidados y la familia feliz y contenta. Por lo tanto, “Bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor “. Todos son María. El dueño de la propiedad era María.
Tú tienes un sueño de lo que quieres ser y lo ves claramente en su plenitud. Ahora bienaventurados son los que pudieron creer lo que les fue dicho por Dios, porque la voz de Dios es el sueño del hombre. Así que, ¿puedo creer que ahora soy lo que quiero ser y ser fiel a la voz de Dios? Entonces, mi palabra no volverá a mí vacía. Si puedo creer, sucederá. No tiene nada que ver con tu pasado, porque Dios le habla al hombre, no le importa quién eres, porque es a través del propio sueño de uno que él te habla.
“No tengas nada que ver con este hombre, porque hoy he sufrido mucho en sueños por causa de él” – mandó a decir la esposa de Pilato. Pilato recibe esta nota de su esposa cuando aquel, que era la encarnación de la verdad, estaba delante de él. Pilato es la encarnación de la razón y la verdad no responde a la voz de la razón. Pero la razón no podía creer que Dios le habla al hombre a través de un sueño, por lo tanto, no hizo nada. Dios puede hablar a través del sueño nocturno, pero generalmente asusta porque no lo entiende. “Él le habla al hombre en un sueño, en una visión de la noche”. Lo hace para que podamos cambiar nuestro propósito y cambiar nuestras acciones, porque si noche tras noche mis pensamientos diarios son reorganizados en mis sueños nocturnos para asustarme, entonces, ¿qué estoy haciendo para que eso suceda? Porque noche tras noche, él dramatiza mi día, pero no en orden cronológico. Él toma todo el día y lo dramatiza y si no es agradable, me asustará para hacerme revertir mis acciones y mis pensamientos; reorganizar el contenido de mi mente y llegar al punto donde puedo luchar con este ser (mi ser interior) como lo hizo Jacob y obtener un nuevo nombre, para que mi sueño diurno se pueda proyectar de noche, tal como lo soñé durante el día. Jacob quería el moteado y rayado y vino justo como lo vio.
La Biblia entera, de principio a fin, es la visión de Dios hablando al hombre y él le habla al hombre a través de los sueños. Las visiones son diferentes de los sueños y vienen por la Gracia y sólo para dar testimonio del progreso que haces, son las marcas en el camino. A veces escuchas una voz directa, aunque eso es inusual, pero Dios siempre le está hablando al hombre a través de sus sueños del día. La voz de Dios es escuchada por el hombre en los sueños.
En el principio, él coloca al hombre (Adán) en un sueño profundo y no hay ningún registro de que haya despertado, por lo tanto, aun está dormido. Luego, “Dios les habló en el fresco de la tarde”. Es todo Imaginario. Es el hombre en un sueño profundo y Dios está hablando a través de los sueños. “Si hay un profeta entre ustedes, Yo, el Señor, me manifestaré a él en una visión; hablaré con él en sueños”. No tienes que quedarte dormido para soñar. Todo en el mundo me está hablando y yo estoy hablando conmigo mismo y mi propia maravillosa imaginación, es Dios que me habla. En el principio era el sueño y el sueño estaba con mi imaginación y el sueño era mi imaginación, y por ella todas las cosas hechas fueron hechas.
Entonces, yo comienzo en un sueño, pero puedo cambiar mi sueño y cambiando mi sueño, cambio la actividad de mi imaginación y así cambio los fenómenos de mi vida. Si no lo cambio, sigue igual. Si conoces a alguien a quien le gustaría esto o aquello, tú no levantas un dedo físicamente, sino que sueñas para ellos. ¿Cómo sería si fuera verdad? Represéntalos a ti mismo como si su sueño fuera verdad y luego no haces nada para que eso ocurra, porque un verdadero sueño tiene su propia forma de cumplimiento. Esa es tu Palabra y no puede regresar a ti vacía. Pero yo soy libre de cambiar la Palabra de Dios y así cambiar la frase y hacer que deletree algo diferente. Puedes tomar doce palabras y expresar devoción o, por su reorganización, expresar algo espantoso.
La Palabra de Dios es el sueño del hombre. Entonces, ¿qué estamos soñando? Si sólo lo creyeras y te convirtieras en el Ser de quien se dijo: “Bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor”. Porque tú eres ese Ser de quien se habla. Piensa en el estado ideal que te gustaría lograr y no lo modifiques. Piensa en el estado ideal para ti. No hay dos que quieran lo mismo. Pocos querrían hacer lo que yo estoy haciendo y muy probablemente a mí no me interesaría hacer lo que tú estás haciendo. Sueña noblemente. Tú tienes la Palabra. Su uso puede causar una aparente agitación, como lo hizo este hombre. Él no hizo nada más que tomar su viaje imaginario pasando por su propiedad y ver las cosas como él quería que fueran. Pero entonces – lo que podría llamarse una agitación – el accidente de la mujer. Él ha preguntado si él causó el accidente. ¡Ciertamente! Su Palabra lo causó. Tomó eso para liberar a la mujer del monstruo que estaba viviendo de ella. ¿No fue un precio pequeño a pagar por liberarse y disfrutar de lo que vino a continuación? Pero ten cuidado con la palabra que hablas, porque la Palabra de Dios es el sueño del hombre. Y como el sueño del hombre es causado por su propia imaginación, entonces, ¿quién es Dios?
La semana pasada, tuve una experiencia celestial tras otra con mi padre, porque he pensado tanto acerca de él; él es parte del drama de la noche y puedo tomar cualquiera de estas partes y encontrar su significado para mi instrucción. Aquí, la otra noche estuve con mi padre. Yo sabía que él había partido y él lo sabía; él sabía que los chicos no podían verlo. Mi hermano Collin salió en la lluvia y consiguió unos ‘pescados voladores’. Ahora bien, él emplea a dos o tres mil personas, cualquiera de los cuales pudo haber hecho esto por él, sin embargo – en el sueño – él mismo salió y consiguió estos ‘pescados voladores’ y los trajo. Ahora, en las islas no hay nada más barato que el pez volador. Si tú quieres delfín, pides delfín, etc., pero si tú pides “pescado”, siempre tienes un pescado volador. Y en el sueño, mi padre me dijo: “Es maravilloso. Él no es engreído y puede usar sus propias manos para hacer lo que algunos piensan que sólo los sirvientes deberían hacer “. Mi hermano fue uno de los ocho hijos que llevaron a mi padre hasta su tumba. Mi sueño no me asustaba porque yo sabía que mi padre estaba donde Collin no podía verlo, pero él estaba mirando y estaba orgulloso de que su hijo mostraba no ser engreído y podía hacer lo que cualquier empleado hubiera estado dispuesto a hacer por él.
Tomando el hoy y viviendo tan plenamente en la imaginación como la persona que quiero ser, entonces obedezco la Palabra de Dios. Yo puedo tomar la misma palabra y distorsionarla, porque yo soy Él, porque la Palabra de Dios es el sueño del hombre y eso, brotando de la imaginación, ese es Dios.
Así que Dios, Cristo o Imaginación, son intercambiables, y todo está hablando de tu propia maravillosa imaginación humana. Pero si durante el día, yo modifico la Palabra debido a la evidencia de mis sentidos, entonces la Palabra que he enviado la ha anulado, pero si me he mantenido fiel a mi imagen, entonces debe cumplir aquello a lo que se envía.
Todos pueden escuchar a Dios, porque todos son Dios. Tú no eres una cosa pequeña separado de Dios. La gente va a la iglesia y se arrodilla y tratan de escuchar a Dios y esperan que Dios los perdone por algo que ellos mismos se están condenando. Esto también es una Palabra de Dios, pero ¡que confusión! No hay nadie que interceda por ti, porque todos somos Uno. Así que, ponte de pie y habla la Palabra para todos y para ti mismo. Entonces tiene que cumplirse, porque la imaginación crea la realidad y no hay nada que la detenga.
Mi padre estaba en una playa en Barbados hace treinta años y lo veía como un lugar perfecto para un hotel. Él nunca vaciló en ese sueño. Pasaron los años, los propietarios finalmente murieron y cuando salió a la venta, la única persona que podría haber pagado el doble de lo que mi padre podía, había ido a Brasil y su oferta llegó por cable veinticuatro horas tarde. El sueño de mi padre se hizo realidad, aunque lo hizo treinta años antes. Él era Jacob y luchó con una idea hasta que se hizo realidad. Él primero la hizo real en el ojo de su mente y cuando llegó el momento, la única persona que podría haber superado su oferta, fue llamada a retirarse. Mi padre no ideó eso, pero cuando el hombre en Brasil recordó la venta y envió su oferta, llegó con veinticuatro horas de retraso.
Todos aquí – tú eres Dios- No eres algo pequeño. Dios se convirtió en ti para que puedas despertar y saber que eres él. Nada de lo que has hecho causó la llamada “Caída”. No hay “pecado original”. Era Dios realmente convirtiéndose voluntariamente y amorosamente en su propia creación que se llama: hombre, para que pueda despertarlo y convertirse en él mismo. Fue hecho a propósito y deliberadamente para despertar su creación y cuando se despierta deja de ser creado porque es Dios, así que “el que viene después de mí, es antes de mí: porque era primero que yo”. Esto, que fue primero una imagen y fue iluminado por Dios y es Dios, entonces no tiene principio. Ese es el secreto. Algo que tuvo un principio está iluminado por algo que no tiene principio y se convierte en eso, por lo tanto, es también sin-principio. La forma se ilumina y se convierte en un centro de imaginación. Entonces entenderás las palabras: “Glorifícame con aquella gloria que era mía antes que el mundo fuese”. Así, el hombre, en el verdadero sentido no puede empezar después de que él es iluminado por Dios.
Entonces, toma tu sueño más maravilloso y no importa lo que el día parezca traer, un sueño es la palabra de Dios y no puede fallar. ¿Puedes creer que eres la persona que quieres ser? Apégate a eso y contrólalo y no permitas que se convierta en un revoltijo en el transcurso del día, porque si lo haces, Dios tomará el “revoltijo del día” y lo reorganizará en el sueño de la noche y podría asustarte, pero sólo será para instruirte. Estos sueños son creados por ti en el transcurso del día, pero si ahora sólo fijas el patrón de vida que deseas y permaneces fiel a el, no puede volver a ti vacío, sino que debe cumplir su propósito.
Encontrarás a lo largo de los sesenta y seis libros de la Biblia, que él siempre está apareciendo al hombre en un sueño. No importan los “hombres santos” o los “lugares santos”. Dondequiera que tú estés, eso es tierra santa, “Quítate los zapatos, Moisés” porque donde está el hombre, allí está Dios, porque Dios es el hombre. No busques a alguien que venga con túnicas. El hombre real, es el hombre natural y actúa de manera natural, pero enterrado en él está el Segundo Hombre, el Señor del Cielo y ese es Dios. Deja al hombre natural engendrarse en su imagen dividida. Pero ese hombre, el hombre natural, muere. No obstante, se te dice “Ustedes son Dioses”.
Se nos dice que condenaron a Jesús, no por lo que él había hecho, sino porque él blasfemó. Él dijo que era el Hijo de Dios. Él les dijo: Yo digo que la ley te dice esto. “Yo digo que ustedes son Dioses y todos son hijos del Altísimo. Sin embrago morirán como hombres y caerán como cualquiera de los príncipes”. La Escritura no puede ser quebrantada. Entonces ¿blasfemo cuando digo que yo soy el Hijo de Dios? Te digo que estoy consagrado y enviado por mi padre, ¿y tú me llamas blasfemo? Tú eres en realidad el Hijo de Dios, el Hijo del Altísimo. El Segundo Hombre debe despertar al hombre natural. Así morirás como cualquier otro hombre natural, sin embargo, el verdadero tú, es el Hijo del Altísimo.
Cuando él dijo que iba a morir y, sin embargo, que era el Hijo de Dios, ellos no sabían que hablaba del segundo hombre. La primera prenda en la cual estoy tejido, debe ser desechada cuando despierto desde dentro para descubrir quién soy yo. Primero debo ponerme en visibilidad y convertirme en mortal. Blake escribe:
“Todo lo que nace de un nacimiento mortal debe ser consumido con la Tierra para levantarse libre de la generación; Entonces, ¿qué tengo que ver yo contigo? Tú, Madre de mi parte mortal, con crueldad moldeaste mi corazón, y con falsas lágrimas autoengañadas encadenaste mi nariz, mis ojos y mis oídos; Paralizaste mi lengua con la insensible arcilla, y yo a la vida mortal traiciono, la muerte de Jesús me hizo libre; Entonces, ¿qué tengo que ver yo contigo?”
(A Tirzah)
Esta prenda, el cuerpo, es para ser usado mientras despierto. Pero a medida que me despierto cada vez más, puedo probar por un sueño, que yo soy él. La historia es: “Dios y hacer volver a Jacob”. “El que me formó desde el vientre para ser su siervo, para hacer que Jacob vuelva a él”. Tráeme ese estado mental que puede predeterminar. Él quiere un Hijo como él mismo. Pero, ¿quién puede traer a Jacob? Y ¿cómo puedo encontrarlo cuando es tan pequeño? Sí, él es pequeño, pero ¿quién lo traerá? Porque él te formó en el vientre para traer a Jacob. Él quiere despertar en cada ser uno que pueda crear como él crea, porque él crea por la Palabra y la Palabra de Dios es el sueño del hombre.